Sevilla
y su Semana Santa.
Establecer unos orígenes de la Semana Santa de Sevilla es una tarea complicada ya que son muchos los datos históricos. Desde la Edad Media hay referencias de la existencia de Cofradías pero es en el primer cuarto del siglo XVI cuando proliferan y comienzan a hacer estación de penitencia.
La Semana Santa arranca el Domingo de Ramos y se cierra con el Domingo de Resurrección, cuando de madrugada, sale la última de las Hermandades que procesionan.
Actualmente, todas las Hermandades llegan hasta la Catedral de Santa María de la Sede y tienen que pasar obligatoriamente por la Carrera Oficial, un itinerario impuesto por el Consejo de Cofradías y en el que tienen que cumplir unos horarios fijados previamente para que todo quede bien organizado y sin imprevistos.
Domingo de Ramos.
El Domingo de Ramos es un día especial en Sevilla. Arranca la Semana Santa y es un día para salir a la calle con las mejores galas y disfrutar con las primeras cofradías. También es el día de los niños, porque La Borriquita lleva en su cortejo de nazarenos solo a niños pequeños.
Para empezar un buen Domingo de Ramos, podemos disfrutar de la Hermandad de la Paz a su paso por la Plaza de España, ubicada en el Parque de María Luisa.
Esta plaza es una de las maravillas de la ciudad. Obra de Aníbal González, fue inaugurada para la Exposición de 1929 y en sus bancos están representadas todas las provincias.
Lunes Santo.
El Lunes Santo es la mejor muestra de la devoción de los barrios ya que el Polígono San Pablo, el Tiro de Línea y Triana se vuelcan con sus cofradías.
Todas hacen un largo camino hasta llegar al punto clave de la Estación de Penitencia: la Catedral.
La Catedral de Santa María de la Sede, de estilo gótico, fue declarada por la Unesco en 1987 Patrimonio de la humanidad. Está construida sobre la antigua mezquita y de ésta se conservan el Patio de los Naranjos y la Giralda. Este templo acoge los restos mortales de Cristóbal Colón y de varios reyes de Castilla.
La Giralda es la torre campanario de la catedral y mide 104 metros. Como remate, cuenta con una estatua conocida como “el Giraldillo” y que representa a la fe.
Martes Santo.
Uno de los barrios más emblemáticos de Sevilla es el Barrio de Santa Cruz, antigua judería de la ciudad. Repleto de callejuelas que resguardan del sol y encantadoras placitas donde descansar y tomar un aperitivo.
Este barrio desemboca por el este a los Jardines de Murillo, llamados así por la cercanía a la casa natal del pintor y que fueron diseñados por Juan Talavera y Heredia.
Estos jardines son el espacio perfecto para disfrutar de los pasos de la Hermandad de la Candelaria de regreso a su templo, donde se crea un ambiente único.
Miércoles Santo.
La Plaza de Toros de la Maestranza es otro los puntos turísticos que no se pueden dejar de visitar en Sevilla. Es uno de los cosos más antiguos de España y está declarado como monumento de Bien de Interés Cultural. La primera construcción es de 1749 y su aspecto actual se lo debemos a Aníbal González (1915)
Y la Hermandad más taurina de todas es la Hermandad del Baratillo, ubicada junto a la Maestranza y por la que pasan muchos toreros para rezar antes de enfrentarse a los toros. Como curiosidad, en el llamador del paso de palio, hay dos angelitos toreros sosteniendo un capote.
Jueves Santo y Madrugá.
La Semana Santa de Sevilla es una manifestación cultural en todos los sentidos y, por tanto, también tiene sus peculiaridades en lo que a gastronomía se refiere. Como manda la tradición, el Jueves y Viernes Santo son días de guardar vigilia (no comer carne) de ahí que los principales platos que se consumen estos días son a base de verduras y pescado, sobre todo el bacalao en todas sus versiones.
Uno de los momentos más especiales de estos días es la Madrugá, conocida internacionalmente por la importancia de las Hermandades que discurren por las calles este día. Merece la pena pasar toda la noche en la calle para disfrutar de estas procesiones, de la devoción de los sevillanos y de la llegada a sus vírgenes a los barrios.
Viernes Santo.
Uno de los barrios más populares de Sevilla es Triana. Ubicado, como se suele decir, “al otro lado del río Guadalquivir”, este arrabal es famoso en todo el mundo ya que resulta muy pintoresco y ha sido cuna de numerosos artistas.
Triana además aporta a la Semana Santa de Sevilla varias hermandades. Una de ellas, es la Hermandad del Cachorro, que es una de las imágenes más reconocidas y veneradas no solo en la ciudad, sino en toda España.
Por ello, es imprescindible disfrutar del paso del Cristo del Cachorro por cualquier punto de su recorrido y observar su gesto que representa el momento justo antes de morir y está inspirado en un gitano de Triana que agonizaba.
Sábado Santo.
La Semana Santa llega a su recta final y, tras la muerte del Señor en la Cruz, se espera su Resurrección.
Durante el día de hoy, llama mucho la atención a locales y foráneos la procesión del Santo Entierro, ya que uno de sus pasos representa el féretro de Jesucristo.
Es una buena oportunidad para conocer el barrio de San Lorenzo, su plaza con la Basílica del Gran Poder y la amplia oferta gastronómica de la zona.
Domingo de Resurrección.
Hoy acaba la Semana Grande de Sevilla celebrando la Resurrección del Señor. Una única procesión es la que llena las calles de la ciudad y es la única Virgen de todas las que procesionan que no tiene lágrimas, puesto que ya no es una imagen dolorosa.
Y para finalizar el recorrido por la ciudad, podemos disfrutar de un agradable paseo que parta de la Alameda de Hércules, donde se combinan tradición y modernidad y que siga por la calle Feria (otra de las típicas de la ciudad) descubriendo así el barrio de la Macarena.